lunes, 23 de julio de 2012

Holmes, con cabellera naranja, comparece ante el juez

El sospechoso de la masacre de Colorado compareció en corte a media maña del lunes, donde está siendo acusado.
James Holmes, de 24 años, está enfrentando al menos 70 cargos en relación al ataque que perpetró el sábado pasado, apenas pasada la medianoche, donde murieron 12 personas y cerca de 60 fueron heridas, algunas de ellas de gravedad.
Holmes mostraba una cabellera de color naranja y estaba frente al juez que entiende en la causa. Cuando le hablaba el juez, el acusado bajaba la mirada y daba la impresión de estar en otro mundo.
La madrugada del viernes, James Holmes irrumpió en un cine de la localidad de Aurora mientras se proyectaba el estreno de la última película de Batman y la emprendió a tiros con la multitud, causando la muerte de 12 personas y heridas a más de medio centenar.
Holmes, que también elaboró una compleja red de trampas explosivas en su apartamento, adquirió las cuatro armas que usó de forma legal y encargó material para hacer estallar su vivienda a través de internet durante meses.
Pertrechado con un equipo de protección antibalas similar a los de las fuerzas especiales SWAT y una máscara de gas, Holmes, que compró la entrada y llegó a la sala como un espectador más, regresó al cine por la puerta trasera con bombas de gas lacrimógeno, un fusil de asalto, una escopeta y dos pistolas.
El fusil AR-15 que iba a utilizar Holmes, con un cargador de 100 balas, y una imponente capacidad de fuego se encasquilló, por lo que el tirador echó mano de armas menos potentes, lo que seguramente evitó un mayor número de víctimas.

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